El lenguaje humano, ha evolucionado a la par que esté sufriendo transformaciones en el proceso de maduración de la especie humana, desarrollando múltiples maneras de comunicación. De la forma oral, a la escrita pasando por la iconográfica y en los últimos tiempos la llamada en línea.
La búsqueda de información ha sido desde el principio una necesidad de vital importancia para la supervivencia de la raza humana en virtud de que permitió conocer fuentes de agua y alimentos, peligros, formas de transformar la naturaleza a traces del trabajo y la adquisición de conocimientos de variada índole. El periodismo surge de esta necesidad informativa es una de las últimas adquisiciones de éste en su devenir evolutivo.
Aunado a la estructuración de la conciencia como función integral entre él, su entorno y sus semejantes. Sin embargo es importante entender que es el periodismo.
Así como la manera en la que este ha evolucionado, con el devenir del tiempo, en distintas maneras para dar a conocer un hecho, con los llamados géneros periodísticos (enfocándome en el periodismo interpretativo). Cual es su relación con la literatura y si existe el llamado Periodismo literario. Y por ultimo, de una manera personal, por qué me encuentro estudiando periodismo.
Considerado como un oficio o una profesión el periodismo permite informar y al mismo tiempo, utilizar recursos estéticos que logren el efecto buscado por el periodista, y que enmarquen perfectamente el fondo de la noticia en un interés, dar conocer lo que acótese en el mundo, lo que al público le interesa o debe interesarle y cumple una función puramente social.
El periodismo surge de una necesidad de comunicación. Lorenzo Gomiz en su teoría del periodismo dice que el periodismo es una “generador de reacciones” y quizá esa es una de sus principales funciones.
También busca ofrecer un sistema de comunicación integral e interactivo que permita a la sociedad estar enterado de los avances sociales, de los eventos humanos así como de estar prevenidos ante los desastres tanto naturales como humanos.
El periodismo, para mi, es la manera de dar a conocer un hecho que tiene una importancia. La interpretación de dicho suceso lo más apegado a la verdad, es decir un balance en entre lo que se percibe y la realidad.
Para crear este balance de percepción y realidad, existen los géneros periodísticos. Los cuales algunos autores los dividen en informativos, de opinión e interpretativo.
“La diferencia entre el genero informativo y el de opinión está en que el primero aspira más a la objetividad, y el periodismo de opinión, llega a utilizar juicios de valor, basados en hechos objetivos, y una equilibrada ponderación ideológica, política y filosófica” (Abraham Santibáñez).
Sin embargo en el género interpretativo la clave está en explicar o aclarar el sentido de un hecho. Responde más que nada a la complejidad de la información moderna.
Algunos autores consideran que es dar un servicio al hombre ocupado “la formula Time” (Henry Luce), que no tiene tiempo para leer todos los diarios todos los días, “una asesoría profesional de un periodista que explica” (interpreta) (H.L.).
EL periodismo de interpretación necesita de formulas y filtros que se encuentran en los géneros, como en la crónica y el reportaje interpretativo, la entrevista, y la crítica.
La importancia de éstos es ayudar al lector ha entender un hecho de la mejor manera posible, proporcionando un contexto que es determinante para su plena compresión.
Tanto la crónica como el reportaje hacen de un hecho, algo más rico en cuanto a información ya que el lector no sólo se queda con los datos fríos, sino que muchas ocasiones lo acercan a las personas, a la repercusión que dicho hecho puede tener. Y se puede enriquecer con algunos recurso literarios para hacerlo más calido, y embellecerlo.
“Los hechos son sagrados las ideas libres” (Topología anglosajona). Partiendo de lo anterior, se piensa que existe un desacuerdo entre la literatura y el periodismo, se cree que el periodismo no puede ser literario porque falta a su primera premisa que es informar con objetividad, y que la literatura tiene que partir de hechos ficticios.
Sin embargo tanto la literatura como el periodismo comparten la belleza del lenguaje.
En la crónica, el reportaje, la editorial, la columna y la entrevista se pueden hacer usos algunos recursos literarios como la metáfora, personificaciones, comparaciones, etc., para dar mayor realce a lo que se esta diciendo, una novela puede narrarse como crónica.
Pero cierto es que en el periodismo no debe haber ficción. No obstante existe algo llamado Periodismo Literario o Nuevo Periodismo, que nace con “A sangre fría” de Truman Capote en 1960.
El Nuevo periodismo es una tendencia periodística que aplica una serie de recursos y técnicas de la literatura de ficción y otras corrientes que son consideradas incorrectas por el periodismo tradicional. Pero la belleza del lenguaje existe en ambos y depende también del estilo.
Como ya lo mencione el periodismo para mi es la manera de dar a conocer un hecho que tiene una importancia. La interpretación de dicho suceso lo más apegado a la verdad, es decir un balance en entre lo que se percibe y la realidad. También concuerdo con Gomiz que es un generador de reacciones.
Está de más decir que estudio periodismo porque me gusta leer y escribir, porque eso es obvio y por así decirlo es parte del perfil. Me considero una persona curiosa, no me gusta quedarme sólo con lo que me dicen, me gusta la investigación, y llegar al fondo de las cosas.
La búsqueda de la verdad, la percepción y la realidad me llaman la atención. Me preocupa el ser humano en general, y que tan lejos se está yendo de la verdadera evolución y de la trascendencia.
Considero que es importante abrirle los ojos, mostrarle lo que es capaz de realizar sea bueno o malo, quizá formar una verdadera conciencia social, por utópico que esto parezca.
Por ultimo considero que el periodista o reportero, adquiere un gran compromiso con la sociedad de representar una realidad, serán quizá generadores de conciencias, opiniones y “reacciones”.
También ayuda a recrear y representar los hechos que algún día se convertirán en la historia del mañana y me atrevo a creer que se busca una historia más fidedigna.